Exposición”Juan Muñoz. Todo lo que veo me sobrevivirá”

Hasta el 11 de Junio podrás disfrutar de manera gratuita en la Sala Alcalá 31 de la exposición “Juan Muñoz. Todo lo que veo me sobrevivirá”.

Conmemora los 70 años del nacimiento del escultor español Juan Muñoz, en su Madrid natal, uno de los artistas europeos más importantes de la segunda mitad del siglo XX. 

Reúne algunas de sus piezas más icónicas, fechadas entre 1990 y 2001, año de su prematura muerte y cuando había alcanzado la cumbre del Arte Contemporáneo en Europa, después de inaugurar su gran instalación en la Sala de Turbinas de la Tate Modern de Londres.

En 1997 Juan Muñoz comenzó a idear una serie de figuras que debían instalarse colgadas del techo.

A principios de los noventa Juan Muñoz comienza a romper con los límites de la escultura tradicional y comienza a crear obras de carácter “narrativo,  basadas en instalaciones de figuras de tamaño ligeramente inferior al natural en interacción mutua distribuidas en ambientes cerrados y abiertos.

En sus figuras monocromáticas, gris plomo o color cera, utilizó principalmente elementos como el papel maché, la resina y bronce. En el 2000 le fue otorgado el Premio Nacional de Artes Plásticas.

La última década de producción de Juan Muñoz, estuvo marcada por el dominio del espacio, en una concepción neobarroca. Recupera  la figura humana como elemento central de trabajo. Su vocación existencialista, su cualidad emocional y su reivindicación del truco, de la suspensión de la incredulidad, determinaron la ficción como una característica fundamental del arte contemporáneo, avanzando un cambio que será esencial dentro del arte en el siglo XXI.

Obras en la exposición de Juan Muñoz

Entre todas las obras que podrán verse destaca Plaza, pieza procedente del Kunstsammlung K21 Dusseldorf, que no se ha visto en España desde que el Museo Reina Sofía le dedicó en el Palacio de Velázquez la muestra Monólogos y diálogos en 1996. Compuesta por 27 figuras de ciudadanos chinos en actitud hilarante, será la obra central.

Además, veremos otros trabajos como Dos centinelas sobre el suelo óptico (1990), cuyo parqué perspectivo recibe a los espectadores con una ansiedad barroca en el espacio o Barco con motor III (1990), en la que habla de una condición deambulante suspendida en un viaje perpetuo, pero también de su naufragio, de una fatalidad del destino del mismo modo que Carpet Piece III (1993) habla de una dificultad de movimiento.

Una serie de piezas e instalaciones se suceden en el interior: unos barcos suspendidos, unas mesas preparadas para el engaño en el juego, balcones o tambores inalcanzables.

Asimismo, disfrutaras de otras obras con préstamos procedentes de varias colecciones, tanto nacionales como internacionales, de museos como el Stedelijk van Abbe Museum de Eindhoven, el S.M.A.K. de Gante o la Fundación Botín.